Precitan “por prudencia” el vestuario femenino del instituto ourensano donde murió un alumno al caer un muro

El conselleiro insiste en que no se trasladaron deficiencias sobre el estado de la pared colapsada

OURENSE, 27 (EUROPA PRESS)

El vestuario femenino del instituto ourensano donde el pasado miércoles falleció un alumno al desplomarse un muro ha sido precitando como medida preventiva hasta que se verifiquen las condiciones de seguridad.

Así lo ha confirmado el conselleiro de Educación, Román Rodríguez, que se ha desplazado este jueves a la Ciudad de las Burgas para mantener un encuentro con el claustro del IES Julio Prieto Nespereira, conocido como el ‘Sexto’.

En declaraciones a los medios tras la reunión, el mandatario autonómico ha manifestado su consternación por lo sucedido en el mediodía del miércoles, cuando la caída del muro que separa la zona de duchas del resto del vestuario masculino se cayó provocando la muerte de un alumno de 13 años y causando heridas leves a otro, también estudiante de 3º de la ESO.

“Todo el mundo está conmovido, todo el mundo está triste. Es algo lógico y estamos esperando a tener certezas respecto al porqué de la caída del muro”, ha dicho Rodríguez, que ha insistido, en la línea de lo manifestado por la Xunta desde el suceso, que “en ningún momento” se tuvo conocimiento de “ningún tipo de anomalía o queja respecto a ninguna cuestión constructiva que pudiese llevar a pensar que el muro iba a colapsar”.

De este modo, ha emplazado a que sean los peritos judiciales los que determinen las causas que llevaron al suceso y “a partir de ahí evaluarlas con mucha prudencia, con muchas responsabilidades y adoptar las medidas que sean necesarias”.

“Es una de las peores noticias que se puede recibir en un centro educativo, va a incidir muchísimo en los chicos, en los compañeros, y por eso hay ayuda psicológica”, ha profundizado el titular de Educación.

Además, ha avanzado que “por prudencia” se ha precintado el vestuario femenino, mientras que el masculino se mantiene cerrado por orden judicial y la Unidad Técnica “tendrá que evaluar el uso cotidiano de la pista”. “Por prudencia parece lo más lógico”, ha apostillado.

“NINGUNA” COMUNICACIÓN

Así las cosas, ha incidido en que no constaba ningún tipo de comunicación sobre la deficiencia “ni para la Xunta de Galicia, que es el instituto; ni para el instituto que es la Xunta de Galicia”.

En esta línea, ha garantizado que si los usuarios del vestuario “hubiesen detectado algún tipo de indicador o señal” que permitiese pensar que “esto pasaría” se hubiesen “activado enseguida las cadenas de información y acción para que se ejecutasen las obras pertinentes”.

Asimismo, ha destacado que en los centros educativos existe personal de mantenimiento y que los profesores “están en el centro todos los días”, por lo que cuando se detecta un problema “en una persiana, tubería, humedad o en un muro se solucionan las deficiencias que pueda haber”.

OBRAS EN EL ANEXO

El IES Julio Prieto Nespereira se construyó en 1992 y el pabellón anexo donde se encuentran los vestuarios “tiene aproximadamente veinte años”, según ha apuntado el conselleiro, que ha reconocido que no tiene “el dato exacto” sobre cuándo fue la última obra de mantenimiento realizada en el espacio deportivo.

Rodríguez ha subrayado que el tabique caído estaba “perfectamente alicatado” y en él “no se percibían grietas ni cualquier elemento que llevase a pensar que iba a suceder lo que sucedió”.

Así, ha reiterado que las personas que trabajan en el centro “están al pie del cañón todos los días” y que, si hubiesen detectado anomalías, se hubiese “actuado para subsanar el problema”.

Por su parte, el delegado territorial de la Xunta en Ourense, Gabriel Alén, ha participado en el minuto de silencio realizado a las puertas del instituto en el que falleció el adolescente y, al igual que el conselleiro de Educación, ha manifestado que la Administración “no tenía ningún tipo de conocimiento de que hubiese una deficiencia”.

Con todo, se ha puesto a disposición de la investigación que determinará lo ocurrido, pero sin entrar en eventuales responsabilidades, limitándose a “ofrecer máxima colaboración”.