Este pasado miércoles, Enrique L.E., compareció por videoconferencia desde la prisión de Monterroso en dos juicios separados por delitos de violencia de género contra su pareja, quien era menor de edad en 2020. En el primer juicio, donde se le acusaba de un delito continuado de quebrantamiento de medida cautelar, su abogada solicitó su absolución, mientras que el fiscal pidió un año de cárcel, alegando que a través de Instagram se había puesto en contacto con su pareja, a pesar de existir una orden judicial que lo prohibía. Según la acusación, durante los días 27, 28 y 29 de junio, se comunicó directa o indirectamente con ella, enviando mensajes y emoticonos a través de la mencionada red social.
En el segundo juicio, relacionado con el delito que llevó a imponer la medida cautelar anterior, Enrique aceptó un año de prisión y tres años de alejamiento, con una distancia de seguridad de 200 metros, por maltrato, aunque la Fiscalía no presentó cargos. La acusación particular retiró los delitos de amenazas y coacciones, manteniendo únicamente el de maltrato. Los actos de violencia de género ocurrieron durante los tres meses en los que la denunciante convivió con él durante el confinamiento por la pandemia de COVID-19.
La joven denunció a su pareja a finales de junio de 2020, después de que una vecina alertara a la Policía Nacional. En su testimonio, la denunciante confesó que Enrique la golpeaba y la obligaba a besarlo, mostrando signos de moretones. Durante el confinamiento, habían vivido juntos junto con otra pareja.
- Te recomendamos -
